Saltar al contenido

Recordando caras de la adolescencia seminarista

26 junio, 2013

El 10 de agosto tengo una cita con el pasado, nada menos que con 44-40 años atrás. Entre los 11 y los 14 años estuve interno en el Seminario Diocesano de El Burgo de Osma, y nos vamos reencontrar los que acudamos a la villa burgense a la llamada mercurial de J. A. Caamaño.  Ya he hablado de ello en este blog, en La polar es lo que importa y también en  Mirada seminarista sin nostalgia, así que no me quiero repetir en lo allí ya escrito. Y ahora, a petición de Salvador Andrés vuelvo a publicar dos de mis fotos de entonces, pero esta vez con los nombres de «la tropa» (como dice Salvador).

Seminaristas-1970-en-Vinuesa

Seminaristas-Burgo-de-OsmaEs curioso como en la memoria se me han quedado los nombre de estos compañeros y sus caras (aunque seguro que a la inmensa mayoría no les voy a reconocer cuando nos volvamos a ver).

Y agrego aquí una propuesta que he planteado para que convirtamos este reencuentro en algo más que unas horas de charla y un disfrutar de un pequeño ágape.

Elaboremos un libro electrónico

He aquí una idea que se me ha cruzado por la mente: aprovechemos la ocasión para enriquecernos con los conocimientos de cada uno. Escribamos -los que queramos- unas páginas sobre lo que deseemos, que servirán para elaborar con todas ellas un eBook gratuito en el que podremos aprender de la experiencia y saber de los demás en el tema sobre el que cada uno escriba.

 Quién esté preocupado por el calentamiento global, que escriba sobre ello si le apetece. Quien sea médico y nos quiera dar algunos consejos saludables o está interesado en informarnos sobre algún avance médico o cualquier cuestión que le afecte profesionalmente, pues hágalo así. Quien sea físico que nos ilustre sobre la mecánica cuántica o lo que sea… Quien sea agricultor y está preocupado por la política agraria pues que se exprese en tal sentido… Quien sea profesor y estima que la enseñanza debiera ser así o asá… pues que nos lo cuente… Si alguno es artista, que nos diga cómo se inspira, cómo elabora su obra artística, qué subyace en cuanto a pensamientos-sentimientos-intuiciones en su obra realizada… Quien quiera resumir lo esencial de lo que ha aprendido en la vida en cuanto a relaciones interpersonales, conocimientos filosóficos, experiencias espirituales, etc.. pues que coja el teclado y escriba algo sobre ello…
En resumidas cuentas: aprendamos unos de otros, seamos dadivosos en escribir sobre alguna cuestión que consideramos importante para nosotros para que nos enriquezcamos interiormente leyendo a los demás y que aquel encuentro, que el destino creó conociéndonos en el Seminario, sea para el futuro una fuente de aprendizaje… Esta es, pues, mi propuesta… No nos quedemos tan solo con unas fotos de entonces y una comida cuarenta años después… Ese eBook puede ser, igualmente, un regalo maravilloso para nuestros hijos y para las amistades u otros familiares….
A ver si podemos así tener el eBook elaborado para el día 10 de agosto… O sea, que la fecha tope de envíos de texto sería el 31 de julio…
8 comentarios leave one →
  1. 28 junio, 2013 9:23 am

    Hola, Ángel, buenos días. Veo que has estado ocupado identificando a «la tropa».

    Creo que sólo has identificado a los del B, y no a todos, por cierto. Pues yo veo a uno al que no has identificado. Soy yo mismo. No me extraña que no lo hayas hecho, pues estaba entretenido esculpiendo una barca en un trozo de pizorro con mi navaja. Me acuerdo perfectamente de lo ilusionado que estaba. Soy el que está delante de D. Teodoro Vallejo Alcalde, y si no me equivoco, tengo a mi derecha a José Carlos de Pablo Ortega. Y me ha parecido reconocer a alguno más del A (Pedro Luis Elvira, José A. Martínez, Carlos Marcos………….).

    Pero vamos a dejar que sean ellos los que se vayan identificando, que además con la ampliación que llega a conseguir tu foto, se puede conseguir bastante bien. (Cuando estéis encima de la foto, se pondrá una mano: pinchad en ella y veréis sólo la foto; si volvéis a pinchar, estando la foto sóla, se amplía y se ve muy bien a «la tropa»).

    En fin, Ángel, que hago mención en el blog a tu entrada, para que la gente se anime.

    Un saludo.

  2. Ángel Almazán permalink*
    28 junio, 2013 10:46 am

    Evidentemente, sólo he identificado a los de nuestra clase, pues es con ellos con quienes pasé esos cuatro cursos y yo, cuando menos, no tuve apenas relación con los del grupo A, aunque después, en el instituto del Burgo, sí que se generaron algunas amistades con algunos de ellos. En cuanto a no haberte identificado, pues es que ciertamente no te había reconocido (es que no se te ve la cara, pero arreglado: ya estás señalado), como pasará quizás con alguno del B que esté en esta fotografía y que no le recuerdo…

  3. Sixto permalink
    5 julio, 2013 5:32 pm

    Hay una mano negra que borra mis comentarios…

    No dejáis de sorprenderme, ¡Valentín! Ni me acordaba de su existencia.

    Angel, yo creo que lo tuyo más que memoria es imaginación, vamos que sacar medio Recacha, José Ramón, e identificarlo, manda web´s, claro que supongo que la foto original será más completa.

    José Antonio dice él que es, porque ni en su casa…

    La verdad es que se ve muy bien la foto, ampliándola, claro

  4. Ángel Almazán permalink*
    5 julio, 2013 6:51 pm

    No hay mano negra en borrar comentarios, Sixto… sino imperfecciones en el uso de la tecnología y cosas así… Aquí tienes la prueba, de que ahora sí que me ha llegado tu escrito y hecho público… El que está recortado juraría que es Recacha (en la foto original tengo un trozo más de su cara, por eso lo reitero)

    … En un email me comentabas que en ese comentario que has escrito -y que «los duendes» han hecho que no aparezca (porque no ha quedado registrado en esta sección)- señalabas, respecto a las leyes del proceso del recuerdo «que tendemos a olvidar lo desagradable y recordar los buenos ratos», y concluías con una buena sentencia, en la que estoy de acuerdo plenamente:»el secreto de la buena salud es la mala memoria».

    A mis dieciocho años, viendo una película en Santurce, aprendí una lección vital. El protagonista decía que la segunda mitad de su vida había sido feliz porque había sabido olvidar los malos recuerdos y preservar los momentos felices en su memoria…

    Un abrazo

Trackbacks

  1. La Polar es lo que importa | TAJUECO
  2. Y celebramos en su día los 25 años de COU | TAJUECO
  3. Y seguimos con fotos del Seminario e Instituto del Burgo de Osma | TAJUECO
  4. Caras con nombres en Seminario e Instituto del Burgo de Osma | Agora Simposio

Deja un comentario